· En la entrada al sanatorio se instalará una base portátil que servirá como punto de encuentro y en la que habrá botellas de agua mineral y un WC portátil a disposición de los visitantes.

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· La presencia de los guardas de seguridad se debe al control necesario para que ninguno de los visitantes destroce las ruinas del sanatorio.

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· Las visitas no tienen un aforo mínimo. Sí puede variar el número de guardas de seguridad. Si se completa aforo habrá dos, si no se completa o lo hace sólo hasta la mitad, habrá uno.

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· Habrá un teléfono de contacto específico para la visita. Se le dará el número al inicio de ésta a los participantes y servirá por si se pierden entre las ruinas, se quedan atascados, sufren un ataque de claustrofobia, etc.

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· Es altamente recomendable dejar el coche estacionado en un aparcamiento que se encuentra apenas a cinco minutos caminando del recinto del sanatorio, para no saturar la entrada de vehículos.

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· Es también aconsejable llevar calzado cómodo y acorde a la temporada en la que se realice la visita.

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· Es recomendable igualmente vestir ropa cómoda y adaptada a la temporada en la que se realice la visita. Hay que tener en cuenta que hay zonas del sanatorio a las que no les da el sol y en las que baja gradualmente la temperatura.

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· Se aconseja llevar una linterna potente a la visita, incluso en las visitas diurnas, pues hay zonas del sanatorio completamente a oscuras.

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· Guías, investigador paranormal y guarda de seguridad estarán comunicados en todo momento mediante walkie-talkie. Esta comunicación se cortará durante las dos horas de vivencias paranormales, para no entorpecer la tecnología que permite la captación de fenómenos.

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